30 enero 2014

De la Vid de Gordón a la Pola de Gordón: Viejo Camino de Santiago

Retomamos la ruta de nuestro “viejo Camino de la montaña” desde donde lo habíamos dejado antes de las fiestas navideñas. Lo hacemos después de consultar nuestro Vexu Camin, bueno, en realidad pertenece a D. Julián González, que es quien lo escribió.

La Vid

Salimos de La Vid de Gordón junto a unos bien restaurados lavaderos, por la carretera que bordea la iglesia y después de cruzar el puente, que nos lleva por debajo de las vías del tren a la collada de Buiza de Gordón. La ruta de montaña está señalizada en unos paneles junto al camino.

La Vid

Llegamos a Buiza y maravillados contemplamos el paisaje nevado y la luz del sol sacando resplandores por todos los senderos. Oíamos una música de dulces sones y estrellas...



Aunque la ruta es un poco más larga, en Buiza después de hablar con la gente del lugar, pensé que la comitiva de Leodegundia y Gundisalvo tomaron la dirección a Villasimpliz pues por ahí quedan buenos vestigios de la vía romana.

Buiza

Lo reseño aquí porque al llegar a Buiza atrajo nuestra atención la Calle de la calzada (romana) y al hablar con la gente del pueblo nos indicaron que la antigua calzada romana primitiva venía desde Pola de Gordón por Beberino y después de pasar Buiza se bifurcaba en dos direcciones, una a Rodiezmo y otra a Villasimpliz que sin llegar a esta localidad, es por donde yo creo que vinieron nuestros protagonistas. Por este camino en el alto de san Antón existió desde antiguo un monasterio y una hospedería pues no tenemos que olvidar que por aquí pasa el Camino del Salvador. También nos dan cuenta de un miliario anepigráfico posiblemente de época de la dominación romana.

Buiza

Yo solo conocía de oídas la existencia de esta bonita localidad de montaña, pues en mi época del servicio militar en ferrocarriles uno de mis compañeros era de esta localidad, por supuesto, contaba maravillas de su pueblo. Quise saber de su vida, me dijeron que se ha jubilado y vive en Torrevieja, aunque viene en el verano. Le mandé un saludo.

Buiza

¡Quién me iba a decir a mi, que el pueblo de Plácido tenía tanta historia! Pues Buiza aparece documentada desde el año 1188 aunque ya es citada anteriormente en el testamento de Fernando I que en 1036 otorga esta localidad a la Iglesia Ovetense.

Buiza

Habíamos leído que en el año 1796 Jovellanos pasó por aquí y pernoctó en casa de Dª Manuela, la viuda. http://buiza.cranf.net/hist_docus.html

En su diario, el ilustrado nos cuenta sus vivencias y gracias a el sabemos que había cuatro casas con escudos nobiliarios, yo solo encontré tres pero mi amigo Pio Cimadevilla en su libro “Repertorio Heráldico Leonés I” nos da cuenta de los cuatro. http://www.ayto-lapoladegordon.es/buiza/


Buiza

El que yo no encontré estaría según salimos del pueblo a la derecha y D. Pio al describirlo dice que se observaba un anagrama con la inscripción “Estas armas y blasón de Alfonso Villafañe son”. Es muy parecido a otro que sí fotografié cerca de la plaza también correspondiente a los Alfonso de Villafañe.

En nuestro recorrido entablamos conversación con Carmen que había salido a caminar y nos acompañó. Se ofreció amablemente a abrirnos y calentar el local de la Asociación de vecinos el domingo, que hicimos la ruta que es muy de agradecer, teniendo en cuenta el frío que hace en esta época del año.

Buiza

El tercer escudo está en la plaza, y cuando se escribió el repertorio Heráldico la casa que lo ostenta estaba dedicada a cantina. El cuarto y último se encuentra en una casa moderna saliendo en dirección a Folledo, tiene una inscripción: “estas armas y blasón de los Álvarez Quiñones son” (Podéis verlos todos en el reportaje fotográfico)

Carmen además de tener la llave del Teleclub, es la dueña de un perro llamado Pancho, que nos obliga a caminar rápido por todo el pueblo, así visitamos la iglesia y una ermita dedicada a san Antón. La Iglesia actual está edificada sobre una anterior , se nos dijo que la construyeron con cargo a los fondos para las Regiones Devastadas después de la guerra civil, pero que los planos ¡podían ser del arquitecto Torbado!.

La ermita de San Antón es hoy una ruina venerable que sin embargo era utilizada como iglesia mientras se construyó la actual. La otra, citada también por Madoz, se encuentra ya en la carretera que nos conduce a Beberino y está bajo la advocación de la Virgen del Valle.

No sé si por una casualidad del destino o por un milagro de la Virgen cuando paramos bajo el porche de la misma, descansando en los dos poyos de piedra, mi teléfono móvil cogió cobertura para comunicarme ¡que iba a ser abuelo de una niña!

Anécdotas aparte, el culto a esta virgen está muy arraigado por toda la comarca. Nosotros hemos encontrado una web de fotos de Buiza, donde podéis ver la celebración de la Virgen y en diferentes álbunes muchas cosas sobre este pueblo.

Durante la ofrenda

La ermita, llena

Todos los años, el 15 de agosto la gente de los alrededores procesiona hasta aquí acompañando a la virgen y realizan una ofrenda floral.

Buiza

Continuamos por la carretera y después de pasar unas pequeñas hoces giramos a la izquierda para avistar enseguida las primeras casas de Beberino de Gordón.

Beberino de Gordón

En el libro ya citado anteriormente, Pio Cimadevilla nos da cuenta de la existencia de dos antiguas necrópolis cercanas al pueblo junto a la “peña del Castro”. Una contiene esqueletos de caballos la otra pertenece a un enterramiento humano, pero lo curioso es que uno de los esqueletos está enterrado en posición vertical. (Cultura prerromana).

Por este pueblo también pasó Jovellanos y en sus diarios dice que: « En Beberino está lo que llaman Ropería de Guadalupe y un monje con sus criados que cuidan de la gran cabaña del monasterio repartida por estas montañas a veranear ».

Beberino de Gordón

En la actualidad dicha Abadía ya no existe, pero un escudo eclesiástico y a su lado un mosaico que representa a la Virgen con la inscripción “Nigra sunt de Guadalupe” nos sirve para orientarnos sobre el lugar en que se ubicó. Para nosotros fue una sorpresa conocer que el todo poderoso monasterio de Guadalupe tuviera posesiones en estas montañas.

Hablamos con Lola, que paseaba a su perro Lucas y que es la propietaria de una parte del edificio muy restaurado desde entonces. Pasa aquí grandes temporadas acompañando a su hermana que fue catedrática de historia. ¡Todo un lujo de interesante conversación¡

Beberino de Gordón

Hasta este lugar, día de la festividad de San Pedro, patrón del pueblo, la gente procesiona al santo desde la iglesia. Pasareis luego por delante de ella por estar situada junto a la carretera. Es del Siglo XVIII y se construyó a expensas de D. Bartolomé Álvarez Rabanal y su esposa. El retablo original fue expoliado durante la guerra civil

Beberino de Gordón

Al observar las piedras con las que se hicieron algunas casas, los arcos de sus entradas, los patios, pensamos que antiguamente debió de ser un pueblo importante debido creo yo a la Transumancia. En algunos casos estos arcos han sido reutilizados y ya no están en su lugar de origen como el que adorna la plaza. Pero ahora, como el frio del invierno aprieta, la mayoría de las casas permanecen cerradas.

Beberino de Gordón

Entre Beberino y la Pola de Gordón nos topamos con el puente Tornero, descendiente de otro anterior, de la época de la dominación romana. El que hoy vemos, es del siglo XVIII pero a unos 20 metros quedan unos ojos mucho mas antiguos ¡Un puente largo, eh! . El Conde de Luna, bajo cuya jurisdicción se encontraba el concejo de Gordón, cobraba portazgo en este puente así que la gente tenía que “inventarse” otros caminos para evitar su pago pues aún sin Montoro ya eran tiempos difíciles.

Podéis ver pinchando aquí, un libro curioso sobre los antiguos puentes de esta calzada 

Nosotros, en esta ocasión no lo cruzaremos porque el final de nuestra ruta de hoy será esta localidad leonesa cabeza del ayuntamiento donde después de disfrutar de su historia y de sus paisajes lo haremos ahora de su gastronomía. 

Ah, y… ¡Buen camino, peregrinos!

Beberino de Gordón

Fotos y texto de Rafael Cid

26 enero 2014

Fiesta de San Tirso en Pardesivil


Nos hizo ilusión que Cecilia nos invitase a la fiesta de San Tirso en la localidad leonesa de Pardesivil,un pueblecito a la orilla del Curueño, que está cerquita de la Vecilla.  Conocíamos la fuente de agua cristalina que bajo la atenta mirada del padre Aniceto Fernández Alonso, ilustre hijo del pueblo, preside la plaza de la localidad.

Pardesivil

Ejemplar es su biografía, lo que le ha merecido una calle en León desde el año 1983. Este buen fraile nació en 1895. A los 14 años ingresó en los Dominicos de Coria en Asturias. Se ordenó sacerdote en 1921 y continuó sus estudios en Salamanca, Oviedo y Madrid, licenciándose en Teología y Ciencias Físicas. Ejerció la docencia como profesor de Física y Cosmología, primero en España y después en Roma. Realizó interesantes obras, ayudando cuanto pudo. En su casa tiene una placa en la que los vecinos expresan su agradecimiento.

Pardesivil

Fue vicario de la O.P. Provincial luego y finalmente General de la Orden. Hablaba varios idiomas y fundó 22 casas y conventos, se le nombró Doctor Honoris Causa de varias universidades, pero todo eso no le impidió acordarse de sus paisanos y los visitaba siempre que podía. Murió en Roma en 1981. El busto de la plaza junto al sonido del agua de la fuente refresca también su recuerdo.

Pardesivil

Cada vez que bebo agua de la fuente pienso si tendrá algo que ver con la longevidad que alcanzan algunos vecinos de la localidad, como D Nicasio Getino, al que con ocasión de cumplir los 100 años, le hicieron un reportaje en el Diario de León.
Don Nicasio, que era además el padrino de nuestra anfitriona Cecilia, contó en esta entrevista cómo hacía carbón de madera, cómo tenía que “velar la leña” y en carro, dirigirse luego a venderla a la capital. Cuenta también cómo se enamoró de Helena que era novia de su mejor amigo, pero como él tenía tan buena conversación acabó conquistándola. Vivió hasta los 105 años.

Cuando llegamos a Pardesivil ya sonaba la dulzaina y el tamboril haciendo la ronda por todo lo largo del pueblo, que se extiende por la carretera.

Pardesivil

Tras un café al calor de la chimenea de casa de Cecilia, conociendo a su familia y entusiasmándonos con sus nietos, salimos a la plaza para unirnos a la vecindad. Su yerno y su cuñado fueron a buscar el pendón y Daniel la pendoneta.

Pardesivil

Pardesivil

Cecilia nos presentó a la gente con la que íbamos a disfrutar de este festejo.A Rosario que cuida la llave de la iglesia, a Regina, a Ángeles, que le gusta cantar, a Ana que le gusta bailar lo tradicional, a Severino que contó tantas cosas del Camino y de la vida del pueblo en otros tiempos.
A María, la presidenta de la Junta Vecinal y a su hermana Encarna Fernández, que me contaron cómo un día de agosto de 2008 un grupo de vecinos decidieron reconstruir la ermita de San Tirso.

Pardesivil

A pesar de que en el dintel de la puerta una piedra nos da razón de su existencia en 1630, ahora me cuentan que llevaba en ruinas más de cuarenta años y estos valientes, provistos de picos, palas y hasta un tractor, obraron el milagro, pues Santo Tirso quería su ermita. La reinauguración fue una fiesta por todo lo alto y no faltó incluso el corresponsal del Diario de León:


Iniciamos el recorrido precedidos del Pendón y del bravo Daniel, defendiendo contra el viento su pendoneta.

Pardesivil

Por el camino a la ermita yo miraba el precioso arco íris que sin duda la nieve fina, iba formando en dirección a la Vecilla, rezando para que se cumpliera el pacto de Dios con Noé, para que no nos lloviera.

Pardesivil

Pardesivil

Cruzamos el río Curueño que traía bastante caudal.

Pardesivil

A la entrada de la iglesia hubo un pequeño descanso para los saludos.

Pardesivil

Allí nos recibieron el párroco, quien comunicó su próxima estancia en Roma, tres meses de ausencia, en la cercanía del Papa Francisco y el Fraile dominico Marcos Rodríguez, quien talló un Cristo que preside el templo y para esta ocasión además de acompañarnos celebrando una misa excepcional, hizo entrega de otra talla de la Virgen María.

Pardesivil

Es grande la tradición de hombres de Pardesivil que han sido dominicos. Otro dominico, el padre Jaime Lebrato, también hijo del pueblo, recuperó hace poco una de las pastoradas más antiguas de nuestra provincia. Las pastoradas leonesas son mezcla de teatro popular y religioso, interpretadas por gentes del pueblo, consisten en la adoración de los pastores al niño Jesús y según el Diario de León son propias de León.
Un día, el Padre Lebrato encontró un texto de 1890, se trataba de una copia escrita a mano que hizo un tal Ezequiel Getino, vecino de Pardesivil. Bajo su dirección en un tiempo en el que aun no había TV fue interpretada la pastorada por todos los pueblos del contorno.

Tras la celebración litúrgica y después de despedirnos de San Tirso,  descendimos hacia el pueblo, siempre acompañados de la música y del ritmo del viento en los vistosos pendones.

Pardesivil

Paramos en la iglesia, donde el párroco disponía sus quehaceres y contemplamos el templo.

Pardesivil

También en el interior el padre Marcos tenía una escultura, la del crucificado, que se integra en la pared sobre el altar.

Pardesivil

Las devociones religiosas corresponden a los tres pueblos limítrofes: La Mata de Curueño, Pardesivil y Sopeña de Curueño y se centran en tres patronos. Es que esta gente sabía hacer las cosas bien: Se encomendaban a San Tirso, mano santa para los males de piernas y brazos, a San Blas, bálsamo y sosiego para la piel y la garganta y a San Nicolás gran valedor para las animas en pena.

Pardesivil

En el pueblo de Pardesivil se festeja a Santa Susana, que como patrona de la piedra, los protege del pedrisco y es muy sorprendente ver, cuando se la saca en procesión y está en medio de una tormenta, que la lluvia no apaga las velas que la acompañan sobre el trono.

Pardesivil

También celebran a Santa Eulalia y en fin, por si todo esto no fuera suficiente protección, el día 1 de septiembre celebraban a “San Chupo”, que no supe bien de qué santo se trataba, pero sí que en esta ocasión se comía y bebía en abundancia.

Pardesivil

Nos dimos una vuelta por el pueblo contemplando sus hermosas casas blasonadas, la fragua, la casa rural, la escuela, ahora restaurada, los valles y montañas.

Pardesivil

Me dijeron que el nombre del pueblo podía proceder del romanizado “Parata Serviris” y que atendían a los peregrinos. A mí me atendieron muy bien en las antiguas escuelas, donde celebramos una comida de hermandad, al final de la cual, muy a mi pesar, tuve que dejarlos para regresar a León.

Pardesivil

Pardesivil

Pardesivil

¡Hasta la próxima, amigos!

Pinchando el siguiente enlace, podéis leer las Ordenanzas de 1723 http://www.vegasdelcondado.com/pardesivil.htm


Las revistas que se indican en el panel de la plaza:

Pardesivil

http://issuu.com/lamatadecurueno/docs/boletin_77 (este es boletín 77 , si borráis este número y los sustituís por el 80, 81 u 82, podréis tener acceso a los mismos)

Para los que queráis saber más de la ermita, podéis disfrutar contemplando este hermoso vídeo de sus vidrieras.

Pardesivil

Para terminar os proponemos un concurso: Averiguad en que casa del pueblo se encuentra este original llamador.
Esperamos vuestros comentarios al final de este escrito, suerte.

Pardesivil



Texto y fotos de Rosa Fadón y Rafael Cid


19 enero 2014

Los Vadinienses, Conferencia del P. Eutimio Martino y Siro Sanz

Con mucha ilusión asistimos a la conferencia del P. Eutimio Martino, y Siro Sanz, dentro de las actividades de la Cátedra de Historia, del Instituto Bíblico y Oriental, en Cistierna.
Conferencia Vadinienses

Dentro del tema de los Orígenes de la Nación Española, correspondía el estudio de los Vadinienses, una tribu cántabra que vivió en una zona aún por delimitar entre Crémenes y Burón, en el noreste de la provincia de León y hasta Cangas de Onís, al este de Asturias. Ved aquí el resumen que ha elaborado Siro Sanz: http://exsurgecistierna.blogspot.com.es/2014/01/tercera-conferencia-del-ciclo-los.html


Conferencia Vadinienses

Allí estábamos, en el reducido salón parroquial, escuchando al P. Eutimio Martino, algunos de los que amamos a este sabio intrépido. Nos encandilaba con su prodigiosa memoria y su discurrir siempre inquieto, que infatigablemente, trata de hallar respuestas a las muchas preguntas, que quedan por responder de nuestra historia romana y prerromana.

Conferencia Vadinienses

En la conferencia, P. Martino nos habló de los Vadinienses a través de los ejemplos prácticos que aportaban los hallazgos de sus lápidas, mientras Siro se encargaba de pasarlas desde el ordenador a la gran pantalla de pared, sobre la que se centraban todas las miradas.

Nombró los pueblos prerromanos y la localización que documentan las fuentes romanas, pero entre las primeras no estaba el nombre de Vadinienses. Quizá en la época de la conquista de cántabros y astures por los romanos, no se había pergeñado esa denominación, pues el primero que consigna el nombre de Vadinia es Ptolomeo, mediado el siglo III, ubicándolo en el Centro de la Cordillera Cantábrica, mientras que Mela o Plinio, que son geógrafos anteriores, siglo I, no dicen nada.

Nos explicó que todas las lápidas encontradas corresponden a personajes que vivieron entre los siglos II al IV, quizá anteriormente no tendrían el relieve social que se manifestó posteriormente.

Los cántabros sirvieron en los ejércitos romanos, ya que eran famosos por su bravura, puede que entonces empezase a sonar el nombre de Vadinienses como hombres de un clan, de una zona, más que de una ciudad, de la que no se ha encontrado ni rastro. El hecho de que las edades de los finados estén en su mayoría, entre 18 y 30 años aproximadamente, indica que probablemente murieran en la guerra.
Tomamos nota apresuradamente, intentando recoger todo lo que su saber va desgranando en la audiencia.

Conferencia Vadinienses

Citó a José Sánchez Verdiago (Tranoi), que da las pautas adecuadas para la lectura de lápidas y dice sobre la pertenencia, que solamente se hace constar cuando muere fuera de su tierra. Algo lógico que sucede hoy en día, si se muere en tierra propia no precisa decir que se es de aquí.

Con decidido propósito de encontrar utilidad a esta premisa, el P. Eutimio pasa un pañuelo blanco por su frente y lo recoge en el bolso del pantalón con premura, mientras exclama:
- ¡Qué marea de problemas!

Pero pronto encuentra empuje, para sacar ventaja de ello y comprende que siguiendo este principio, Vadinia no sería el lugar donde han aparecido las lápidas sino la zona central de estos hallazgos.

Delimita los puntos externos de los hallazgos de las lápidas: por el oeste El Carrión. Velilla de Guardo, caída hacia el norte (cita a Joaquín González Echegaray) Cangas, Corao y Ponga por occidente al sur de la cordillera Valdeburón, Sajambre, el macizo occidental, Peña Santa, Panderrueda. Al Sur Peñacorada, con alguna lapida excéntrica como la de Vega de Monasterio y Villapadierna.

Hay varios focos importantes en los que se han encontrado mayor número de lápidas: Crémenes- Velilla de Valdoré, donde aparecieron más de 12 lápidas. Otro al norte de la cordillera: Cangas y Corao-Ponga, también en el entorno del macizo de Peñacorada.
Santa Olaja, Valmartino, Sorriba...5 lápidas en Liegos, 1 en Lois. En Armada, Prioro, Puente Almuhey, cuya lápida aparece en pantalla junto al hallazgo de mosaicos romanos...

Conferencia Vadinienses

En el interior de este territorio no han aparecido o simplemente no era necesario citar que los finados eran de allí, lo que explicaría que si bien existen lápidas en torno a Los Picos de Europa, faltan en este lugar. ¡Ah, entonces Vadinia sería un territorio indefinido, una seña de identidad para aquellos que procedían de los altos montes del Vindio!.

El Padre Martino nos mira con picardía diciendo: -Dicen que me lo llevo todo a mi terreno, pero ¿cómo puede hacerse de otro modo? Nos confiesa que estudiará con detalle los topónimos, para encontrar la demostración de este argumento y estamos seguros que la encontrará. ¡Nosotros estaremos atentos!

Sin sentarse nunca, P. Martino mira a la audiencia y a la foto que pasa Siro, mostrándonos una y otra lápida, lee y traduce la inscripción:
Veronigos...
“El agua da nombre a la ribera y a aquel que vive allí” - nos dice y continúa – Ver- Vir- Vor- Uor- Ur-  Y a continuación desgrana una multitud de ejemplos:
Verona, Riego de la Vara, Estaca de Vares, Picos de "Uropa"...

Conferencia Vadinienses

Cita a Fidel Fita, arqueólogo e historiador que hizo su carrera en León, recuperando lápidas de la muralla leonesa y que comparte sus teorías. Nos da el ejemplo de Bodero, de donde proceden los Bodivescos y luego infatigable, sigue con derivaciones: Vis, Vesandino, Puerto de Beza, Vesontium, Vesanzón y en cada término explica su localización, él parece haber visitado o estudiado todo el orbe.

Llega una lápida de Robledo de la Guzpeña y nos confiesa que cuando estuvo en este pueblo recibió una impresión: Aquello tenía que ser un castillo. Le habla la tierra, el entorno, descubre las cosas porque su sensibilidad le dirige, sus ojos ven desde su experiencia y conocimiento y también los nuestros aprenden a ver más allá de lo que veíamos antes.

Allí finó un príncipe de los Cántabros. Le dedican la lápida los deobriegos: briga=fortaleza, de dios.
Fortaleza del agua, porque donde nace el agua lo consideran un lugar sagrado. Máxime en las cumbres, donde pueden surgir arroyos de dos en dos, como es el caso del Castro CampoCiudad, recientemente descubierto, deificado por la confluencia del río Camba, afluente del Cea y el río de La Llama, que se llamó Ceión y dio nombre al Cea, Cidayo, Cidad.

Y es muy importante que se trate de un hombre principal, lo que significa que los romanos otorgaron poder a los propios habitantes del lugar, para mantener la disciplina en su territorio, tal y como se hace hoy en día.

Me llamó la atención de que las lápidas aparecen en pueblos, no en castros, porque Augusto les obligó a abandonar sus castros y ubicarse en los campamentos romanos, lo cual concluye, que muchos de estos pueblos fueron en su día asentamientos romanos.
Gráfico y transcripción de Siro Sanz
TRIDIO . QUIEO . BE / DVNIGUM . CORAI / NA . ANTORIGENUS / AVNCL(O) S(UO) . P(OSUIT) . H(IC) S(ITUS) E(ST):  A Tridio Quieo de los Bedunigos., Coraina Antorigenus lo dedicó a su tío (materno), aquí yace.
Gráfico y traducción recogido en este enlace: http://noticiascomarcales.blogspot.com.es/2011/11/nueva-lapida-vadiniense.html

Ante esta lápida de Valdoré nos hizo reflexionar sobre la importancia del enclave al que se accedía por 3 calzadas
P. Martino nos invita a reflexionar sobre Tridio Quieo del clan de los Bedunigos.  Pone ejemplos, nuevo baile de palabras y las conexiones y derivaciones surgen con ritmo trepidante:
Bovecio, boyero, Vozmediano...Tridio Quieo= Kio, Kieo, Cinética= Fuente del Quiego

Habló de “Agua Salio” de Peña Corada, de Liébana y de 10 ejemplos de ese término en Riaño y Sajambre. Es curioso que en este término se suman dos palabras que significan lo mismo, porque los pueblos invasores, al no comprender lo que significa el vocablo que oyen a los nativos, lo usan sin entenderlo y le añaden su propia palabra para ajustar el significado. Este es el caso de "Calle de la Rua", que tenemos en León, que a poco que se sepa de francés traduciremos como "Calle de la Calle".

Siguió describiendo la de Remolina. Aparece la palabra “longo” también era hidrónimo, en similitud con la forma del río. La lápida que se encontró en ‘Las tierras de San Roque’.


El término S. Roque= robere, fuerza militar, aparece en las Salas con multitud de advocaciones por arriba y por abajo, cuyas iglesias van desapareciendo, porque han sido derruidas, testigos silenciosos que dejan de atestiguar al extinguirse.

El P. Martino recupera del bolsillo del pantalón su pañuelo y lo acerca a la nariz. Me conmueve su sentir y me contagia su pena:
“nos alegraría tenerlas, sin embargo su desaparición no hace más que arrancarnos torrentes de lágrimas”

Pero el P. Martino se anima enseguida, le da fuerza el trabajo que queda por hacer y se pone en marcha en cuanto se presenta la siguiente ocasión de instruirnos, de entusiasmarnos con la investigación, de compartir sus experiencias, de sentir nuestra cercanía.

Rebuscar en el significado de las palabras, encontrando términos prerromanos y siguiendo su utilización en textos medievales y las derivaciones que siguen de ellos con el paso de los siglos es uno de los procedimientos más interesantes de su investigación.

¡Ay, los hidrónimos!. Pero no sólo hidrónimos, hay otros términos, que han llegado a nosotros, que nos descubren la romanización y los pueblos anteriores a ella. Algunos a través de su cristianización. S. Cristóbal, Cristóforo, es un santo con reminiscencias de la palabra cristáforo, es decir el penacho que usaban los soldados de la Legión V Laudae. S. Julián nos trae el recuerdo de Julio César...En Crémenes una lápida dedicada a IOVI OPTIMO MAXIMO y otra la de IULIUS CRESCENCIUS, un general retirado de la legión VII,  una lápida dedicada de Julius...

A mí me parece increíble y el P. Eutimio exclama: ¡Esto pasó aquí!

Conferencia Vadinienses

Pero los hidrónimos... Los hidrónimos nos darán la clave, porque Vado significa río, agua que nace y también el sitio donde nace, la cresta de una Cordillera y de tal palabra ha de derivar el nombre de los hombres que cerca de ese lugar viven. ¿Procederá Vadiniense de Vado? Ahora la palabra más ajustada a significado se emplea para vadear un río, ya que la actividad humana ha predominado sobre el término inicial, pero en la antigüedad y más allá, junto a los Vadinienses está su lugar y en él está el agua, el Vado.

Ved nuestro reportaje fotográfico aquí.





Para saber más:

El tema nos resultaba difícil, como profanos que somos, hicimos algunas lecturas sobre el tema, cuyos enlaces ponemos aquí para abrir boca:

http://www.altoesla.com/Historia/Vadinia_900/Mapavadinia_900.jpg









Texto y fotos de Rosa y Rafa